La panadería ha estado siempre atendida por algún miembro de la familia Pereira. En 1938 tiene una nueva dirección, Argensola número 28, pero no por un cambio de local, sino en virtud del cambio de numeración ocurrido en las calles de Madrid en los años treinta. José Fernández Pereira, más conocido como don José en el barrio, ha sido el penúltimo dueño del establecimiento y el que más ha durado hasta ahora al frente del negocio. Hoy en día es la sobrina de don José, Ana Bravo, quien junto a su marido, Enrique García, regenta el local. Desde 2013 podemos encontrar La Flor del Pan en el número 17 de la misma calle Argensola, en un nuevo espacio que combina lo antiguo y lo moderno, en el que podemos degustar desayunos y comidas en las mesas del propio local, ya que han ampliado sus servicios a una restauración limitada, pero exquisita, también disponible para llevar. Y, por supuesto, también podemos seguir comprando el pan artesano de calidad, totalmente natural, que llevan ofreciendo a su público desde hace más de un siglo.